Es muy importante saber que a la hora de decorar el dormitorio infantil se tienen que tomar en cuenta muchas cosas, como la distribución o los muebles, pero sin duda la más importante, es la decisión de las tonalidades.

Las paredes son clave para crear un ambiente en donde los niños puedan disfrutar y a su vez relajarse. A veces es todo un desafío, pero estamos seguros que con este post te darás alguna idea.

Pintura “Resistente”

Antes de empezar, debes tomar en cuenta de que en la habitación, los niños son expertos en las manchas y va a ser inevitable que manchen la pared.

Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de pintar, es el tipo de pintura que vas a usar. Escoge una ultra-resistente, con tecnología hidrófuga para crear un recubrimiento especial con una capa de alta resistencia, evitando que las manchas penetren en profundidad.

¡Amplía con los colores y recuerda menos es más!

Si la recámara es muy pequeña, opta por colocar colores más claros, como el gris neutro o el beige claro para dar mayor amplitud al espacio y así, no crearás una sensación de espacio pequeño. Recuerda, que es muy importante tener en claro las dimensiones del espacio, ya que así podrás diseñar de forma en que el área no se vea muy “apretada”.

¡Formas Geométricas!

Las líneas rectas y las formas geométricas son una tendencia que puedes agregar a la recámara de los niños, hasta en el cuarto de un bebé queda muy bien. Sólo ten en cuenta que, si es un espacio pequeño debes optar sólo por una pared y si es amplia, puedes jugar hasta con dos paredes.

Tonos blancos y negros ¡Sí!

Estamos en total acuerdo en los tonos blancos y negros en una recámara para los más pequeños. El estilo nórdico nos ha hecho atrevernos a realizar este tipo de combinaciones en el dormitorio. Las notas de color las puedes proponer en los textiles y los accesorios decorativos.

¿Qué hacer con los tonos oscuros?

¡La luz natural! Tu mejor aliada, ya que al usar tonos más oscuros como el lila nocturno, tierra o el gris denim, la luz ayudará a que se vean más tenues. Ten en cuenta que si en el espacio no llega la luz natural es mejor que optes por tonos suaves. Si pones luz artificial para reflejar la luz, usa tonos neutros como el blanco o el beige y utiliza colores alegres en detalles como la decoración o textiles.

¡Añade papel tapiz!

Sabemos que a veces quieres dar color y vida al cuarto de los niños y que los colores no son suficientes y pueden ser aburridos. Aquí entra el papel tapiz, hay mil variedades de ellos, algunos muy coloridos y hasta tonos más tenues con combinaciones de blanco y negro.

Half painted

¡Pintar a la mitad! Esta técnica es una tendencia y la verdad es que queda muy bien en cuartos infantiles inspírate y dale un toque a tu espacio muy colorido y original.

Arriésgate con los colores en el espacio de los pequeños, te aseguramos que les encantará la mezcla de los tonos.

Es muy importante saber que a la hora de decorar el dormitorio infantil se tienen que tomar en cuenta muchas cosas, como la distribución o los muebles, pero sin duda la más importante, es la decisión de las tonalidades.

Las paredes son clave para crear un ambiente en donde los niños puedan disfrutar y a su vez relajarse. A veces es todo un desafío, pero estamos seguros que con este post te darás alguna idea.

Pintura “Resistente”

Antes de empezar, debes tomar en cuenta de que en la habitación, los niños son expertos en las manchas y va a ser inevitable que manchen la pared.

Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de pintar, es el tipo de pintura que vas a usar. Escoge una ultra-resistente, con tecnología hidrófuga para crear un recubrimiento especial con una capa de alta resistencia, evitando que las manchas penetren en profundidad.

¡Amplía con los colores y recuerda menos es más!

Si la recámara es muy pequeña, opta por colocar colores más claros, como el gris neutro o el beige claro para dar mayor amplitud al espacio y así, no crearás una sensación de espacio pequeño. Recuerda, que es muy importante tener en claro las dimensiones del espacio, ya que así podrás diseñar de forma en que el área no se vea muy “apretada”.

¡Formas Geométricas!

Las líneas rectas y las formas geométricas son una tendencia que puedes agregar a la recámara de los niños, hasta en el cuarto de un bebé queda muy bien. Sólo ten en cuenta que, si es un espacio pequeño debes optar sólo por una pared y si es amplia, puedes jugar hasta con dos paredes.

Tonos blancos y negros ¡Sí!

Estamos en total acuerdo en los tonos blancos y negros en una recámara para los más pequeños. El estilo nórdico nos ha hecho atrevernos a realizar este tipo de combinaciones en el dormitorio. Las notas de color las puedes proponer en los textiles y los accesorios decorativos.

¿Qué hacer con los tonos oscuros?

¡La luz natural! Tu mejor aliada, ya que al usar tonos más oscuros como el lila nocturno, tierra o el gris denim, la luz ayudará a que se vean más tenues. Ten en cuenta que si en el espacio no llega la luz natural es mejor que optes por tonos suaves. Si pones luz artificial para reflejar la luz, usa tonos neutros como el blanco o el beige y utiliza colores alegres en detalles como la decoración o textiles.

¡Añade papel tapiz!

Sabemos que a veces quieres dar color y vida al cuarto de los niños y que los colores no son suficientes y pueden ser aburridos. Aquí entra el papel tapiz, hay mil variedades de ellos, algunos muy coloridos y hasta tonos más tenues con combinaciones de blanco y negro.

Half painted

¡Pintar a la mitad! Esta técnica es una tendencia y la verdad es que queda muy bien en cuartos infantiles inspírate y dale un toque a tu espacio muy colorido y original.

Arriésgate con los colores en el espacio de los pequeños, te aseguramos que les encantará la mezcla de los tonos.